Presentación del Foro Agua, Alimentos y Sostenibilidad
INGENIEROS, CIENTÍFICOS, AGRICULTORES Y GANADEROS SE UNEN PARA DAR RESPUESTA A LOS PROBLEMAS DE LA GESTIÓN DEL AGUA Y LA PRODUCCIÓN AGROALIMENTARIA ANTE LOS DESAFÍOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO.
Manuel Pimentel: “Hay que poner en marcha políticas de adaptación enfocadas en el bienestar de los ciudadanos”
Puedes ver la jornada aquí:
El Foro Agua, Alimentos y Sostenibilidad (FAAS) ha comenzado hoy su andadura con la celebración de una jornada bajo el título "La urgencia de estrategias para la adaptación al cambio climático".
El Foro nace con el objetivo de aglutinar la energía y el conocimiento de ingenieros, técnicos, científicos, agricultores y ganaderos, para aportar soluciones adaptativas innovadoras a los problemas reales de la sociedad ante los desafíos del cambio climático en la gestión integral de los recursos hídricos y de la producción agroalimentaria distintas de las que hoy se plantean en España y desde la UE, sin perjuicio de las estrategias de mitigación. Está presidido por José Trigueros, presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos y su vicepresidenta es María Cruz Díaz Álvarez, presidenta de la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos.
En la conferencia inaugural, Manuel Pimentel, editor, ingeniero agrónomo, ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales
y autor del libro “La venganza del campo” anunció un inminente cambio de ciclo en las prioridades de los ciudadanos.
Las políticas de adaptación vuelven a ser políticas concretas y reales, enfocadas en el bienestar de los ciudadanos, y en la supervivencia del modelo europeo de sociedad democrática y humanista.
Por su parte Philippe Gourbesville y Luis Balairón, presidentes mundial y español de la Asociación Internacional de Ingeniería e Investigaciones Hidro-Ambientales (IAHR) apuntaron la necesidad de una ingeniería y una ciencia hidráulica volcadas en la investigación y en la innovación para poder optimizar el agua disponible para todas las necesidades.
José Rebollo, Ingeniero de Caminos, consultor en hidráulica e hibridación energética, subrayó en su ponencia, dedicada al bombeo ligado a las renovables, que las centrales hidroeléctricas reversibles deberían ser la base de una energía barata y autónoma para personas, industria y agricultura y la mejor forma de proporcionar autonomía hídrica y energética.
En la mesa redonda sobre política hidráulica, en la que participaron los ingenieros de caminos Francisco Javier Flores Montoya, Joaquín Díaz Cascón y Tomás Sancho Marco, la principal conclusión fue que España dispone de recursos naturales y humanos para conseguir la autonomía energética hidráulica y alimentaria y para ser la huerta de Europa.
Pero para ello son necesarias políticas nacionales de consenso y no de confrontación entre territorios, que deberían plasmarse en un pacto nacional del agua que atienda a la solidaridad hídrica y que dé soluciones a los problemas en lugar de avivarlos.
Por otra parte, Raquel Bravo, doctora ingeniera agrónoma, destacó las externalidades del regadío que produce un gran número de beneficios socioeconómicos y medioambientales, generando un efecto multiplicador a lo largo de la cadena agroalimentaria. Añadió que resulta crucial impulsar acciones de concienciación y visibilización de la importancia estratégica de la agricultura en general y del regadío en particular para España y la UE en su conjunto.
José Ignacio Cubero, doctor ingeniero agrónomo y doctor en Biología, máximo experto en genómica para la producción de alimentos de España, indicó que la biotecnología será una herramienta fundamental para una agricultura adaptativa y capaz de alimentar a toda la población.
Javier Santacruz, doctor en Economía por la University of Essex (Reino Unido), destacó que la adaptación comienza con la comprensión del impacto de fenómenos climáticos cada vez más extremos: sequías e inundaciones. Y abogó por crear y potenciar los mercados de carbono y de derechos de agua, de manera que exista un precio a los recursos, generar ahorros, eficiencia y la financiación suficiente para tener aire y agua de calidad.
En la mesa agraria se puso de relieve el impacto socioeconómico que el cambio climático tiene ya en el sector primario. Pablo Resco, responsable de Estrategia Agroalimentaria en Plataforma Tierra y experto en los efectos del cambio climático en la agricultura, recordó que el 6% del valor de la producción agrícola española, más de 550 millones de euros, se pierde cada año en España a consecuencia del cambio climático.
En este sentido, Andrés del Campo, Presidente de honor de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (FENACORE), Fenacore insistió en que es fundamental equilibrar medio ambiente y usos y demandas de agua. “Debemos ser capaces de usar el agua como un recurso natural, escaso, que requiere la adopción de criterios lo más técnicos posibles, sin caer en la demagogia o en la utilización política del agua, que es la peor contaminación que sufre”.
Además, recordó que el regadío es esencial para garantizar la seguridad alimentaria y proporcionar alimentos en cantidad y asequibles. En España en los últimos 25 años el agua destinada al conjunto de los regadíos ha disminuido un 15 por ciento.
Para finalizar Matilde Moro, gerente de la Asociación de Productores de Vacuno de Carne (Asoprovac), destacó los esfuerzos del sector ganadero para avanzar en sostenibilidad y reducir tanto la huella de carbono como la hídrica en las producciones pecuarias y puso en valor las externalidades ambientales y sociales del sector.